Hoy publicamos un artículo de
Pablo Morterero, secretario de formación y comunicación de la Agrupación
Local "José
Galán Merino" del PSOE de San Jerónimo, en el que analiza la cascada de
hechos que se vivió la semana pasada entorno a la gestión de Rajoy, como
presidente del Gobierno y del Partido Popular.
El pasado viernes
20 de diciembre fue un verdadero viernes negro la mayoría política y mediática
de la derecha española. Ese día se visualizó el desmoronamiento ético, político
y económico de la amplísima mayoría parlamentaria que la ciudadanía española
otorgó al PP en las últimas elecciones generales del 20 de noviembre de 2011, y
que se concretó en tres hechos muy diferentes pero que muestran una radiografía
nítida del fracaso de la actual derecha española.
El juez Ruz ha
sido exquisito. Donde otras mandan a más de medio centenar de guardias civiles,
él mandó a una secretaria judicial con dos policías. Pero la insuficiencia
numérica, y el retraso en el envío, no pueden tapar lo más obvio. Que el
partido que sustenta al gobierno de la Nación y controla las Cortes Generales, el
partido que impone la composición de todos los órganos de control y regulatorios
de extracción parlamentaria, sea investigado por un juez por corrupción, es un
hecho gravísimo en parámetros europeos.
Pero aún más lo
es la negativa del presidente del gobierno y del Partido Popular, señor Rajoy,
de explicar convenientemente las fuertes sospechas de corrupción con imputación
de algunos de sus más directos colaboradores. Por mucho que lo niegue la
derecha mediática y social, tras llevarnos a la república bananera en lo
social, ahora el PP nos mete de lleno en la república bananera de la
corrupción.
TARIFAZO ELÉCTRICO: CAMBIAR UNA LEY 24
HORAS DESPUÉS DE APROBARSE
La derecha
mediática y social española generalmente argumentan que la derecha política
está más cualificada que la izquierda para gobernar, genera más fiabilidad, y
crea más confianza en los mercados. Dicha afirmación, falsa por otra parte, ha
llegado a ser creída por una parte significativa de la sociedad a base del
principio goebbelsiano de la orquestación: Si
una mentira se repite lo suficiente, acaba por convertirse en verdad.
Pero
el pasado viernes 20, el rey se quedó desnudo a la vista de todos. El “mantra”
de la derecha se vino a bajo cuando ante el fracaso de la política energética
española (instituida por Aznar en 1997) el ministro Soria anunció la suspensión
de la subasta eléctrica (que afecta a la “sacrosanta” seguridad jurídica del
neoliberalismo de los mercados) y del cambio de la ley aprobada 24 horas por el
Congreso de los Diputados, gracias al rodillo de la mayoría absolutísima del
PP, y en contra del resto de grupos parlamentarios que advertían del error de
la misma.
La
derecha cuando gobierna es legislativamente chapucera, arbitraria y sólo
centrada en beneficiar a sus “patrocinadores”, sin interesarle lo más mínimo el
interés general, más allá de conseguir los votos suficientes para seguir
cobrando sobres y sobresueldos.
UN FALSO ANTEPROYECTO DE LEY QUE DEVUELVE
A LA MUJER AL
FRANQUISMO
Gracias a series
como “Cuéntame”, muchos ciudadanos supieron, o recordaron, la situación de
postración social, política y económica de las mujeres española durante la
dictadura franquista. Su sometimiento económico al varón, incluso impidiendo la
administración de sus propios bienes, la imposibilidad de abrir una cuenta
bancaria o sacar los pasaportes a sus hijos, la tolerancia hacia la violencia
de género (al punto de castigarse con un simple destierro el asesinato de la
esposa) y la imposibilidad de acceder a la planificación familiar, los medios
de prevención de embarazos y la persecución penal al aborto, entre otras muchas
realidades de más de la mitad de la población española, se habían olvidado
durante los 30 años de democracia, creyendo que dicha realidad nunca más iba a
regresar a nuestro país.
Pero la negativa
del PP a condenar el franquismo lo que oculta es su deseo de regresar lo antes
posible a esa España gris, intolerante y asfixiante. La ley de seguridad
ciudadana, la ley Wert, etc. son pasos que siguen ese camino de regreso al
pasado más oscuro de la historia de España.
Y el anunciado
anteproyecto de ley contra el aborto (que a pesar de la mentira del ministro,
realmente se trató de un informe al Consejo de Ministro), va en esa dirección:
negar a la mujer el pleno dominio sobre su vida, supeditada a la voluntad a una
cultura patriarcal. Primero se comienza negando el derecho a la propia
sexualidad y reproducción, y finalmente a negar la propia esencia de persona
libre y sujeto de derechos.
¿QUÉ HEMOS HECHO PARA MERECERNOS ESTO?
En 24 horas, se
ha visto el Partido Popular más auténtico, autoritario, corrupto e incapaz para
gestionar lo público. Las fantasías sobre su honradez, su eficacia y su
carácter reformista han saltado por los aires.
Tener un gobierno
corrupto, retrógrado e ineficaz no es cosa de un día. La corresponsabilidad, en
diferentes grados, nos afecta a todas y a todos. Las acciones de unos, las
omisiones de otros, comportamientos nada ejemplares, confusión ideológica,
inexistencia de pedagogía política, etc. nos han llevado a que las urnas
validen, y con mayoría absolutísima, una candidatura encabezada por un incapaz,
rodeado de corruptos, y con la pretensión de someter, una vez más, a más de la
mitad de la población a una deleznable dictadura de género.
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