EL AYUNTAMIENTO “PRESUME” DE LA RETIRADA DE NARANJAS, MIENTRAS EN SAN JERÓNIMO SE PUDREN EN LOS ÁRBOLES

“Retirado ya en Sevilla un millón de kilos de naranjas amargas” Con este titular de ABC, Zoido sacaba pecho ayer para intentar demostrar que en sus manos la ciudad de Sevilla funciona como un “reloj suizo”. Pero la campaña de autobombo se queda con las vergüenzas al aire observando como las naranjas amargas se pudren en los árboles de barrios como San Jerónimo. Mientras, Juan García Camacho, delegado del Distrito Norte, preocupado solamente por hacerle “oposición” al barrio.

Pasear por las calles de San Jerónimo es comprobar el fracaso de la gestión del PP al frente del Distrito Norte y del Ayuntamiento. Cada una de las naranjas amargas que cuelgan putrefactas de los naranjos del Patronato o calle Navarra, por ejemplo, son, en el mejor de los casos, los “galones” de la ineficacia del PP para gestionar Sevilla, y en el peor de los casos, la demostración de que la derecha sevillana sigue castigando a barrios como San Jerónimo, mientras “cuidan” otros como Centro, Triana o Nervión-San Pablo.

Tampoco hay que obviar que la nefasta gestión del Delegado del Distrito Norte, sin talla política, aparentemente más preocupado por “solucionar” la situación del paro de la familia que de gestionar el Distrito y desbaratar a la sociedad civil de San Jerónimo, no contribuye especialmente a resolver los problemas cotidianos de los y las vecinas de nuestros barrios.

Este blog viene denunciando esta situación desde hace semanas, ya que a parte de su impacto sobre la floración de los naranjos esta primavera, la no retirada de los frutos de los árboles provoca que se pudran y caigan al suelo, con el consiguiente perjuicio, ya que provocan problemas de higiene, pueden alterar el tránsito de personas, especialmente mayores en muchas de sus calles, y afectar negativamente los automóviles aparcados bajo sus copas.

Por ello, desde el PSOE de San Jerónimo exigimos al Distrito Norte y al Servicio de Parques y Jardines que se recojan las naranjas amargas de los árboles del barrio y pidan disculpas por priorizar otros barrios de la ciudad.