El concejal socialista David Guevara interviniendo en la Asamblea ciudadana que rechazó el tanatorio
El Grupo Socialista ha podido
comprobar como el proyecto del nuevo tanatorio en la Avenida José Galán Merino
lleva más de un año encima de la mesa del alcalde, que ha gastado 6.000 euros
públicos en hacerlo viable, que se ha saltado por decisión política los
procedimientos de participación obligatorios y que recoge claramente la
construcción de un horno crematorio pese a los engaños del gobierno del PP
“No es el equipamiento que
necesita San Jerónimo para desarrollar este suelo público, supone el enésimo
incumplimiento del PP con el barrio, no tiene las garantias legales y sobre
todo no viene avalado por ningún proceso de participación ni consenso”, detalló
el concejal socialista David Guevara.
El
Grupo Socialista, que ha rechazado dese el primer momento el proyecto de Zoido
de un nuevo tanatorio con hornos crematorios privado en un suelo público de San
Jerónimo, ha advertido de las “graves
dudas e interrogantes” que surgen del análisis del expediente y de la
existencia de “intereses ocultos” en
este proyecto que “no responde ni al
interés general, ni al interés del barrio, y desde luego no ha sido consensuado
con nadie”.
Según
la documentación que ha podido comprobar el concejal del Grupo Socialista David
Guevara el anteproyecto del tanatorio de San Jerónimo fue presentado por una
empresa privada en febrero de 2014 al Ayuntamiento de Sevilla. En su diseño se
recoge expresamente la construcción de una “zona
de cremación compuesta por una sala de espera, una zona intermedia y un horno
de cremación”, así como otras instalaciones como una sala VIP. Todo ello en
un suelo público, ubicado en la Avenida José Galán Merino, de 4.600 metros
cuadrados reservado para equipamientos sociales y públicos del barrio.
Después
de un año con el proyecto encima de la mesa, a dos meses de las elecciones el
gobierno de Zoido intenta “a escondidas y
con engaños” esquivar los procedimientos obligatorios para este tipo de
procesos, es decir, sacar a exposición público el anteproyecto de una empresa
privada para abrirlo a la participación y permitir la presentación de
alegaciones. Es el mismo sistema, por ejemplo, que sí se siguió en otros
proyectos presentados por empresas privadas como el Paseo del Arte en Juan
Carlos I o el Museo de Artes y Costumbres.
En
vez de abrir el proyecto a exposición pública, con “extremada y sorprendente prisa” a dos meses de las elecciones
convocaron la contratación de un servicio de auditoria previa invitación de las
empresas que podían participar para adjudicar por un importe de 6.000 euros un
informe que avalara y garantizara el impulso del proyecto privado de un
tanatorio. Todo esto con un procedimiento “exprés
y urgente” de sólo quince días. “Es
decir no es una iniciativa privada, sino que el gobierno de Zoido ya se ha
gastado dinero en apoyarlo y en su ejecución sin ninguna justificación y
transparencia”, advirtió el concejal socialista David Guevara.
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