LA PROMESA DE ZOIDO DE BAJAR IMPUESTOS QUEDA EN NADA ANTE LA NEGATIVA DEL ALCALDE DE CONCRETARLA EN EL PLENO DEL PASADO VIERNES

La mayoría absoluta del PP evita que se debata la moción socialista que pretendía esclarecer el difuso anuncio realizado por Zoido en el Debate del Estado de la Ciudad “y que los sevillanos pudieran conocer antes de septiembre cómo quedará un cuadro fiscal que lleva dos años subiendo y que no repercute en la mejora de los servicios sino en la mejora de los bancos a los que se les devuelve deuda por adelantado”

Los socialistas volvieron a plantear que el Ayuntamiento neutralizara el 10% del IBI extra prorrogado por Rajoy, junto que el ICIO se coloque al nivel de 2008 para incentivar al sector, que el IVTM recupere las bonificaciones por domiciliación, que el IAE se aplique de manera más equitativa con un nuevo callejero, y que el impuesto de transmisiones abandone el tope máximo y se coloque en el 29%

El PSOE lamenta que la mayoría absoluta de Zoido en el Pleno votara en contra de admitir la urgencia de la moción presentada para aclarar con compromisos concretos y datos el anuncio hecho por el alcalde para rebajar los impuestos en 2014. “Zoido no puede prometerlo sin más en el Debate del Estado de la Ciudad y salir corriendo; debe dar explicaciones y asumir propuestas concretas”, explicó el portavoz Juan Espadas. Sin embargo, al rechazar el debate, el PP alimenta la sospecha de que el anuncio de Zoido es un nuevo conejo en la chistera, un bluff que hace a finales de agosto para conseguir el titular, pero que matizará u olvidará cuando llegue el debate de las ordenanzas en el que deba concretarse.

De hecho, los socialistas planteaban la urgencia de la moción basándose en la obligación que tendrá el Ayuntamiento de elevar al Ministerio de Hacienda en septiembre un avance del presupuesto para 2014, “por lo que, si es cierto que quiere colocar a Sevilla en la media de la tabla fiscal de ciudades españolas, ya debería disponer de los datos y estar en condiciones de contárselos a los sevillanos”.

La moción socialista planteaba unos mínimos a partir de los que construir la auténtica rebaja fiscal que beneficie al bolsillo de los sevillanos y también de las empresas, toda vez que el resultado de las subidas hechas por Zoido en sus dos presupuestos como alcalde han conducido a generar ingresos municipales que no han derivado ni en más servicios, ni en mejores prestaciones, sino que han ido destinados exclusivamente a adelantar la deuda contraída con los bancos. Así, en 2013 el cálculo del Ayuntamiento indica que ingresará 28,4 millones de euros extras que irán directamente a los bancos.

En este sentido, el PSOE considera que la clave sigue estando en el Impuesto de Bienes Inmuebles, la figura impositiva por la que los ayuntamientos reciben más ingresos anuales. El PSOE ha venido reclamando sin éxito mediante propuestas y enmiendas a lo largo de los dos últimos años que Zoido neutralizara la subida aprobada por Rajoy que se fijaba en un recargo del 10% en el recibo de 2012 y 2013, que hace semanas se prorrogó también a 2014 y 2015, y que suponían en ingresos extraordinarios para el Ayuntamiento unos 16 millones de euros por año. Para ello, Zoido debía aplicar la rebaja al coeficiente del IBI que depende íntegramente del Ayuntamiento y a la que “no han querido tocar argumentando que era ilegal pese a que otros ayuntamientos de España así lo habían decidido y pese incluso a disponer de una circular de la FEMP -siendo Zoido aún presidente- en la que se explicaba que era posible esa modificación”, como señala Espadas.

“Nos han dicho siempre que era ilegal y que prácticamente éramos unos indocumentados y si ahora quieren de verdad cumplir con la rebaja fiscal anunciada no tendrán más remedio que aplicar lo que le veníamos diciendo desde hace dos años”. En la práctica, la medida incluida en la moción socialista para el próximo pleno se trataría de bajar de 112,48 euros de media en el recibo a los 90,11 euros, el correspondiente al recibo que pagan los vecinos de Castellón, la ciudad que ocupa el puesto medio de la tabla nacional de referencia “y el lugar que Zoido ha comprometido para Sevilla” –actualmente ocupa el puesto 11-.

Junto a esto, el alcalde debe recuperar tanto los fraccionamientos como las bonificaciones por domiciliaciones no sólo del IBI, sino también del resto de impuestos que han supuesto una subida encubierta en 2013 de entre el 1 y el 5% en 2013.

De igual forma, los socialistas ven una oportunidad en la nueva regulación que del IBI tendrá que hacer Zoido, para incluir la bonificación de hasta el 95% del recibo que permite el Gobierno central si el Ayuntamiento declara las actividades que desarrollan tanto EMVISESA como EPSA de interés público municipal, una opción que el alcalde ha dejado pasar y que permitiría prácticamente la exención para los pisos sociales.

Respecto al Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras, los socialistas consideran que “la única fórmula de que tenga impacto real una rebaja que permita incentivar el sector es reestableciendo el tipo en el 2,88% en que se encontraba en 2008 antes del boom inmobiliario”.

En el Impuesto de Actividades Económicas, que sólo abonan las grandes empresas, la moción propone que no se rebaje sino que se vuelva a calcular en base a un callejero actualizado que reparta más equitativamente el importe.

No será necesario tampoco tocar el sello del coche, donde Sevilla se encuentra en el puesto 32 de la tabla de 52 ciudades españolas, aunque sí recuperar la idea de que se pueda domiciliar el recibo y recibir por ello las bonificaciones a que antes se tenía derecho.

Por último, sobre el impuesto de plusvalías en el que Sevilla se encuentra en el tipo máximo permitido, el PSOE pide que rebaje al 29% según la promesa del alcalde de buscar la media nacional y que se cree una bonificación para la transmisión de terrenos que supongan negocio familiar.

Con todo, Espadas planteaba esta moción en clave de mínimos sobre los impuestos que más afectan a los ciudadanos y a la recaudación municipal con el aviso de que “Zoido debe también tener en cuenta en la rebaja fiscal comprometida el conjunto de tasas y precios públicos”.