Los y las socialistas españolas apoyan las
negociaciones entre la Unión Europea
(UE) y los Estados Unidos de América (EEUU) para lograr el Acuerdo Trasatlántico
para el Comercio y la
Inversión (TTIP en sus siglas inglesas), pero no aceptarán
cualquier a cuerdo.
Las líneas rojas marcadas por el PSOE son
la máxima transparencia de todo el proceso y que la información disponible sea
clara y suficiente para dar respuesta a las preocupaciones ciudadanas, y que en
ningún caso suponga un perjuicio para los intereses de la ciudadanía europea,
sabiendo que están excluidas de las negociaciones la liberalización de los
servicios públicos en todos los niveles de la Administración ,
incluyendo la local y el régimen de concesiones.
La posición del
partido liderado por Pedro Sánchez ha marcado nítidamente sus líneas rojas en
la negociación del TTIP. Estas son la preservación absoluta de los estándares
de protección social y medioambiental de la UE , incluida la protección de derechos laborales,
como son la libertad de asociación y los derechos sindicales, y de derechos de
los consumidores, como son la protección sanitaria y fitosanitaria.
También los
socialistas son firmes en la exigencia de una adecuada transparencia en el
proceso de las negociaciones y en la exigencia para que el gobierno de España
realice un estudio de impacto del TTIP para nuestro país, como han hecho otros
países europeos.
Sobre una de las
preocupaciones más importantes de las y los trabajadores españoles en relación
al TTIP, el PSOE exige que se incorpore un capítulo en el Acuerdo que
desarrolle los derechos laborales que deben aplicarse en todos los niveles de
gobierno, así como incorporar un mecanismo de resolución de disputas en materia
laboral.
En relación a la
protección y la privatización de datos, el PSOE quiere que antes de la posible
entrada en vigor del TTIP la UE
cuente con una legislación apropiada en materia de protección de datos, para
que los ciudadanos recibamos las mismas garantías de protección contra el
espionaje que los ciudadanos estadounidenses.
Otra de las
exigencias de los y las socialistas españolas son el reconocimiento mutuo de
cualificaciones profesionales, la regulación de los mercados y servicios
financieros y la retirada del sistema de arbitraje para la resolución de
conflictos entre inversores y Estado (ISDS). Se trata de uno de los puntos más
controvertido, ya que el ISDS pretende un sistema de arbitraje de carácter
privado y de difícil acceso para las
pequeñas y medianas empresas que no pueden afrontar los elevadísimos costes que
suponen, mientras que en la EU
y los EEUU existe un sistema judicial bien desarrollado que hace innecesario
tener que acudir a un sistema de arbitraje.
Por otra parte,
el PSOE quiere dejar claro que están excluidos de la negociación del TTIP los
servicios públicos en todos los niveles de la Administración ,
incluyendo la local y el régimen de concesiones.
EL TTIP ES NECESARIO PARA QUE EUROPA
RECUPERE EL LIDERAZGO MUNDIAL
Para las y los
socialistas españoles el TTIP tiene una importancia geopolítica que va más allá
de cuestiones económicas, ya que el Plan chino para liberalizar el comercio en
Asia, puede llevar a Europa a quedarse rezagado en el mercado mundial.
El TTIP que los y
las socialistas españoles desean es un proyecto también de enorme trascendencia
económica, porque daría lugar a la mayor área de libre comercio del mundo, con
una población de 820 millones de personas, un PIB equivalente el 60% del PIB
mundial y un volumen de transacciones comerciales valorado en la actualidad en
960 mil millones de euros.
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